"Elysium" según Jorge Arellano

Más ciencia-ficción. Futuros que hablan del presente. 'Elysium'. Matt Damon. Dirige Neil Blomkamp ('Distrito 9'). Jodie Foster. Además, Diego Luna y Wagner Moura ('Tropa de Élite'). Entretenida distopía, deudora de títulos emblemáticos de la literatura como 'Mercaderes del Espacio' o el 'El Jardín de Rama', de Frederick Pohl & Cyril M. Kornbluth y Arthur C. Clarke, respectivamente. También me recuerda bastante a uno de los poemas más visionarios y extraños de Charles Bukowski, escrito hace muchas décadas, donde vaticina que, la separación entre ricos y pobres atravesará la línea de la exosfera.

2159. Poco trabajo. Sólo queda miseria aquí abajo. El sistema brutal de clases, condena a los desheredados a morir de hambre y desesperación. Los pocos afortunados que conservan un trabajo, son explotados despiadadamente. El sistema, completamente automatizado y deshumanizado, les trata como animales de carga. La especie parece haber regresado a los tiempos de los faraones egipcios.

Para salvar su vida, Matt Damon, con  ayuda de leales amigos, delincuentes, piratas informáticos, armas cibernéticas, tiene que conseguir un viaje a esa nueva estrella de la muerte, donde los ricos viven a sus anchas, y una oscura gobernanta, planea un golpe de estado y endurecer las leyes de inmigración.

La película se vuelve entonces dinámica, con inteligentes y sofisticadas secuencias de acción. Damon quiere vivir. Además, en su cerebro, utilizado como procesador natural por la tecnología venidera, lleva escondido un programa. Un programa que podría cambiar para siempre, el Destino de la humanidad.

Jorge Arellano

Alumno del Curso de Dirección de Cine

"Toro Salvaje" según Jorge Arellano

Martin Scorsese estaba muy malito. Su vida carecía de sentido. Postrado en cama, absorbido por el agujero negro del exceso, se debatía entre la vida y la muerte. Su gran amigo Robert de Niro, le visitaba con frecuencia, y, en una de aquellas visitas, en lugar de flores, le regaló un guión. Un guión, 'Toro Salvaje', duro y realista, brillante. Un guión que le devolvería la ilusión y cambiaría su vida para siempre.

No es momento de hablar ahora de interpretaciones, fotografía, planificación o montaje, si no de sonido. La película obtuvo ocho nominaciones y dos Oscars. Uno para Robert de Niro, que engordó más de 20 kilos para el papel, y otro para Thelma Schoonmaker, por su espectacular montaje. No obstante, Donald O. Mitchell, Bill Nicholson, David J. Kimball y Les Lazarowitz estuvieron a punto de derrotar a todo un Imperio (Contraataca) aquella noche, con su asombrosa  creación sonora. Entre otros efectos, durante los combates, añadieron rugidos de fieras, objetos que se rompen estrepitosamente, golpes de viento. Y todo esto para enfatizar la lucha titánica entre dos púgiles en el cuadrilátero. Utilizaron, ¡el silencio!, que a priori debería ser contrario a su profesión. Escuchadlo. Puede ser, en un momento de la carnicería, el sonido que más duele, el que nos haga temblar. También se pueden escuchar llantos de niños, como en el padrino. El llanto de un niño nos obliga a mirar. Aunque sepamos que a continuación va ocurrir algo horrible. Una auténtica sinfonía. Una genialidad con marca 'amigos y colaboradores' de Martin Scorsese.

Jorge Arellano

Alumno del Curso de Dirección de Cine

"La mosca" según Jorge Arellano

Hola, amiguitos. Inauguramos una nueva sección de crítica. A partir de hoy, seleccionaré movies que sean importantes en el campo del maquillaje y la caracterización. Soy nuevo en este sector, pero promete ser un trabajo apasionante de búsqueda, selección y entretenimiento. Bienvenidos. Comienzo con 'The Fly'.

Allá por los años 80, un autor en franca progresión, David Cronenberg, asume el riesgo de hacer suyo el remake de uno de los clásicos baratos del cine de terror estadounidense: 'La Mosca'. ¿Recordáis? Un genio obsesionado con la teletransportación, sufre, por un fatal accidente, una nauseabunda y espantosa metamorfosis. El insecto que da título a la película, se cuela en una de sus cápsulas, cuando finalmente, el científico, se decide a probar el nuevo invento consigo mismo. El resto, para los que la habéis visto, es de sobra conocido; para los que no, preparaos para una colección de imágenes turbadoras, en una obra con ecos existenciales. ¿Quién sueña, la mosca al hombre o el hombre a la mosca?. Filosofías aparte, una película recomendable, ganadora del Oscar a los mejores efectos de maquillaje en el año 1986. La dirección de estos espectaculares trucos, corrió a cargo de Chris Wallas y Sthepan Dupuis. El primero de ellos, Wallas, pasaría a dirigir tres años más tarde la secuela: 'The Fly II'.

Para los amantes del látex y la silicona, las caretas y las prótesis. Hoy día casi todo se hace ya por ordenador. Destaco la interpretación de Jeff Goldblum, porque hay actores (y actrices) que hacen suyo, del personaje, el vestuario, el maquillaje. Fijaos como cambia la expresión corporal, fijaos en sus tics. 

Jorge Arellano

Alumno del Curso de Dirección de Cine

"El Expediente Warren" según Jorge Arellano

La familia Perron acaba de mudarse a su nueva casa en Harrisville, Rhode Island. Prontamente, un jaranero grupo de espíritus, harán su aparición: en las habitaciones de de las hijas, en los armarios, en el sótano o en la cocina... Fantasmas con personalidad. Unos quieren jugar, otros asustar y el más peligroso, poseer el alma de los vivos: en este caso, a la mamá Perron. Sus vidas se vuelven un infierno y los asustados inquilinos de esta casa alucinante, se ponen en contacto con una pareja de reputados cazafantasmas, los Warren, especialistas del más allá. Descubren el origen de los ruidos y cadenas, lo ocurrido en aquella casa. Utilizan todas sus trucos: pero el caso irá mucho más lejos de lo que imaginan.

'El Expediente Warren', es, prontamente, un clásico dentro del circuito de terror, sección casas encantadas. Tenemos obras notables, tanto en la literatura como en el cine. 'Al final de la escalera', 'Amityville', 'Poltergeist', 'Los Otros, 'La casa deshabitada', 'El Resplandor', 'House', 'El Orfanato'...  Los autores de las últimas décadas han ido sacando a los ghosts de sus viejas mansiones y casas de campo, para meterlos en hoteles, urbanizaciones, rascacielos, y, últimamente, en Pé-Cés y teléfonos móviles.

La película tiene una fuerza y un dinamismo considerable; Una trama eficaz; Situaciones de susto y sorpresa buenas; No recurre, como una muletilla, al efecto sonoro impactante; Interpretaciones logradas; Tiene un tufillo vetusto que se hacía de menos en este orden de macabradas; Más que Bien. 

Jorge Arellano

Alumno del curso de Dirección de Fotografía